Queridos amigos,
Ayer, 14 de septiembre, día de la Exaltación de la Santa Cruz, y la fiesta de Cruz de Matará, la cruz que llevamos con nuestro hábito como religiosas “Servidoras del Señor y la Virgen de Matará”, rama femenina de la Familia Religiosa del Verbo Encarnado, tuvimos la enorme gracia de poder visitar la Basílica de Getsemaní, en donde pudimos quedarnos a rezar por una hora, luego algunas de las hermanas pudimos visitar también la Basílica del Santo Sepulcro, venerando el Calvario; la Edícola que contiene la piedra del sepulcro en que fue depositado el cuerpo inerte de Nuestro Señor; así como también la capilla de santa Elena, lugar en el que la santa encontró la Cruz, allí pudimos rezar el rosario encomendando a Dios todos los miembros del Instituto de las Servidoras, pidiendo la gracia de saber abrazarnos a la Cruz de nuestro Señor, trofeo del Redentor en el que se encuentra la salvación del mundo, Ave Crux Spes Unica!
Estaban presentes nuestras hermanas de la Casa provincial, con la Madre Cielo la superiora provincial, las hermanas del Hogar Niño Dios, las hermanas que trabajen en el Seminario del Patriarcado de Jerusalén, las hermanas de Jafo, y Taybe.
Damos gracias a Dios, a través de María, por tantos beneficios recibidos y pedimos “la gracia de ser fieles a los misterios adorabilísimos tallados en la cruz que lleva el nombre de Matará”